El sector del calzado se ha incorporado a la Economía Circular con el objetivo de sumarse a los principios de defensa medioambiental, reducir el consumo de recursos naturales, aminorar los efectos del Cambio Climático y mejorar los procesos industriales con la consiguiente mejora en el aprovechamiento de recursos reciclables de otros sectores o, incluso, de restos del mismo proceso de producción.
La experta en Economía Circular de Grupo Innova, Begoña Beltrán, explicó a los representantes de las empresas del calzado la necesidad de adaptar al conjunto de la organización en los procesos de Economía Circular, desde una visión global que tiene que ver con conocer las exigencias de un mejor aprovechamiento de los recursos naturales y establecer una estrategia global. “Esto afecta a todos los ámbitos, que tienen que ver con el diseño de nuestros productos, pero que también debe condicionar a la empresa y sus rutinas en la mejora de la separación selectiva de residuos, así como en materia de sensibilización de las personas que intervienen en todo el proceso”.
La experta de Grupo Innova apuntó que “muchas veces los residuos es un valor, es un activo. Hay ya algunas empresas del calzado, cada vez más, que están aprovechando residuos propios o de otros sectores, como pueden ser restos de materiales agrícolas como el maíz o plásticos reciclados”.
Para Beltrán, la incorporación de la empresa en la Economía Circular supone dotar de un valor añadido al producto final, puesto que demuestra un compromiso social por parte de las marcas en la lucha contra el Cambio Climático, la eliminación de restos en vertederos y, como consecuencia, una reducción de los gases del cambio climático.